Tijuana, en Baja California norte, se está convirtiendo en la localidad mexicana en donde ningún profesional de la comunicación está libre de ser asesinado. El pasado domingo, Marcos Islas se convirtió en la tercera víctima en esta ciudad y en el quinto del gremio en este inicio de año.
Marcos, de 31 años, fue ejecutado en la madrugada del día 6 de este mes de febrero a las puertas de su domicilio. Era hijo de Marco Islas Parras, y sobrino de Víctor Islas, ambos periodistas.
Padre e hijo colaboraban en el portal de noticias Notiredes.com, medio que, curiosamente, llevaba sin funcionar más de un año, según algunas fuentes. Marco es el director general y Marcos se encargaba de las redes sociales y de gestionar la web. Según ha informado Marco, alguien había dejado un aviso indicando que el asesinato era consecuencia de la llegada de una nueva «administración».
Según ha informado a este medio Teodoro Rentería Arróyave, presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, Conalipe, los vecinos vieron a dos personas correr tras escuchar los disparos. También ha trascendido que elementos de la policía municipal lograron detener a uno de los presuntos asesinos identificado como Fidel “N”, de 27 años, quien es originario de Tlaxcala.
Autoridades federales consultadas, integrantes del grupo de élite que participa en las investigaciones de los crímenes en contra de Lourdes Maldonado y Margarito Martínez Esquivel, asesinados en la misma ciudad, aseguran que no se descarta ninguna línea de investigación.
En este sentido, el gremio periodístico organizado: Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, Fapermex; Conalipe; Club Primera Plana; y Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, Felap-México, solicitan de las autoridades municipales, estatales y federales lo siguiente:
- Investigar a fondo, dando la misma importancia de los casos de los colegas Maldonado y Martínez, ante la actividad familiar que los vincula con el periodismo.
- Informar de los avances y conclusiones de la investigación correspondiente; confirmar la participación de la persona detenida y en su caso profundizar si es que existe autoría intelectual.
- Garantizar en Tijuana, y en todo el país, el libre ejercicio de la libertad de expresión y del derecho a la información.
Un año sangriento
Para Balbina Flores, representante en México de Reporteros sin Fronteras (RSF), abordar la compleja situación que está viviendo el periodismo mexicano requiere tener en cuenta el contexto de la violencia, la impunidad y el funcionamiento de los mecanismos de protección.
Entrevistada por el periodista Alejandro Jiménez para el podcast Periodismo en Riesgo*, Flores explica que antes de plantear cuál es la salida a este grave problema de violencia, se deben considerar «tres ejes importantísimos».
Se refiere al contexto de la violencia, «que se agudiza en algunas regiones del país»; a la impunidad en los asesinatos y desapariciones de periodistas «que no ha mejorado», y a la urgencia de hacer «una revisión profunda del funcionamiento de los mecanismos de protección estatales y del federal» para fortalecerlos.
Consultada sobre el discurso del presidente Andrés Manuel López Obrador contra periodistas y medios, Flores dice que «son expresiones que enrarecen el ambiente en un país tan peligroso… En un contexto de este tipo tendría que tener alguna moderación».
Según Conalipe, de 2000 a la fecha, han ocurrido 287 asesinatos en México: 245 periodistas; cuatro locutores: 11 trabajadores de prensa; 14 familiares y nueve amigos de comunicadores; dos civiles, y dos escoltas.
* Periodismo en Riesgo es un podcast de la SIP (Sociedad Interamericana de Prensa) producido por la Organización Editorial Mexicana (OEM), cuyo director, Francisco Torres, es el vicepresidente regional de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la organización para México. Es coordinado por Martha Ramos, directora de OEM y presidenta de la Comisión de Internet de la SIP.
