La Fundéu indica que la expresión vergüenza de volar es un equivalente válido y adecuado del término sueco flygskam.
Paulatinamente, va tomando fuerza un movimiento medioambiental que, difundido sobre todo por la activista sueca Greta Thunberg, llama a replantearse la necesidad de viajar en avión, dados los altos niveles de CO2 que este tipo de transporte emite en cada desplazamiento.
La alternativa vergüenza de volar recoge el mismo sentido que la palabra sueca, es válida y clara en español, y cuenta ya con bastante uso, por lo que se recomienda como traducción preferible.
En los medios, además, no faltan ejemplos de vergüenza a volar:
La vergüenza a volar, la nueva amenaza de las aerolíneas.
Sin embargo, esta traducción resulta menos aconsejable, ya que la colocación habitual en español es tener vergüenza de algo o por algo, y no vergüenza a algo.
Uso recomendable
- El fenómeno de la vergüenza de volar arrancó en Suecia y se está expandiendo como un reguero de pólvora.
- La vergüenza de volar, el movimiento que apuesta por el tren para salvar el planeta.