Una misma raíz, la adaptación del francés portefeuille, dio origen a dos vocablos en español con significaciones distintas: portafolio -cartera de mano- y porfolio -conjunto de fotografías o grabados-.
Así, en el programa de actividades de un festival de fotografía, por ejemplo, está mal dicho «Visionado de portafolios», sobre todo si a continuación se añade «Cuota de incripción, 20 euros», pues lo correcto es decir: «Visionado de porfolios», en cuyo caso, desde el punto de vista de los visionadores, el importe de la cuota podría tener incluso un cero más.
Ver portafolios, esto es maletines de ejecutivo o carpetas de artista, es una cosa y examinar porfolios -el contenido de la carpeta de artista del fotógrafo, esto es, las fotografías-, una cosa bien distinta.
Portafolio -cartera de mano- es el continente; porfolio -conjunto de fotografías o grabados-, el contenido