La Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) celebró, con motivo de su Centenario, el festival ‘Casablanca FIDE 100’, en la capital económica marroquí, Casablanca y la Tercera Semana del Ajedrez (MCW, siglas en inglés) del 17 al 19 de mayo de 2024.
Se trata de una iniciativa conjunta de la Bolsa de Casablanca, Casablanca Eventos y Animación y la Real Federación de Ajedrez de Marruecos (FRME). Se organizaron diferentes actos, como en las dos ediciones anteriores, incluyendo conferencias y eventos: Ajedrez en el Parque, torneos y talleres de divulgación, entre otros.
Entre las novedades: el festival ‘Casablanca FIDE Cien’ y el torneo ‘Casablanca Chess’. El festival reflejaba la conmemoración del Centenario de FIDE, acogiendo la Ceremonia de la Antorcha, que viaja por todo el mundo durante todo el año hasta llegar a la capital húngara, Budapest, que celebrará las Olimpiadas de Ajedrez en septiembre.
En África, la antorcha pasó el pasado marzo por Accra, la capital de Ghana y ahora Casablanca. Sus próximas etapas son Kazajistán y Colombia.
Se organizó el domingo 19 de mayo un acto en Casablanca, en el Parque de la Liga Árabe, con varias actividades para el público en general con unas simultáneas en la que participaron un centenar de aficionados.
También, la muestra fotográfica ‘Captura’ del fotógrafo alemán Stev Bonhage con imágenes relacionadas con la competición del ajedrez y que estará abierta hasta el domingo 19 y luego, del 21 al 26 de mayo, se mostrará en Rabat.
El torneo ‘Casablanca Chess’, enfrentó a cuatro importantes jugadores que representaron a cada continente: El indio Vishy Anand por Asia, el egipcio Bassem Amin por África, el estadounidense Hikaru Nakamura por América y el noruego Magnus Carlsen por Europa.
Este torneo lanzó la idea de la ‘Variante Casablanca’, una novedad y aportación diseñada para celebrar la historia del juego de ajedrez. Se trata de jugar desde una posición ya conocida y recogida de partidas clásicas. Carlsen fue al final el ganador.
Todo en lo que se refiere a la propagación del ajedrez muy correcto, pero entre todas estas celebraciones destaca un gesto por parte del actual presidente de FIDE, el ruso Arkady Dvorkovich denominado ‘el tirano de FIDE’.
Hay que recordar que acudió a Casablanca pero sin embargo, y sin explicaciones oficiales por parte de FIDE, no estuvo presente en la clausura del torneo de Candidatos de Toronto en Canadá del que salió como retador del actual campeón mundial, Ding Liren, el indio de 17 años Dommaraj Gukesh, el más joven a disputarlo en la historia del campeonato.
El motivo de la ausencia de Dvorkovich es que Canadá le negó la visa debido a sus relaciones con el régimen ruso de Putin, ya que la invasión de Ucrania en febrero de 2022 impuso una serie de sanciones internacionales que un país como el norteamericano sigue de forma estricta contra determinados dirigentes rusos y más en este caso, ya que se trata de los escasos al frente de un organismo internacional.
Tirano premia a verdugo
Pero ahora en Casablanca, el llamado tirano de FIDE ha tenido un gesto con motivo del Centenario de la federación, a celebrarse por todo lo alto en París en julio, premiar a un verdugo. Efectivamente, Dvorkovich otorgó la Medalla al Mérito de la FIDE al actual ministro de Educación marroquí, Chakib Benmoussa, conocido como ‘el verdugo del Sábado Negro’.
Lo más curioso es la justificación de esta medalla: ″por el reconocimiento a su contribución al desarrollo del ajedrez en la región”. Hay que mencionar que el ajedrez en Marruecos dista mucho desde hace años de estar desarrollado a la altura de otros países africanos y árabes como Egipto, Argelia o Emiratos Árabes Unidos.
Conviene recordar la corrupción manifiesta, como en otros sectores de la sociedad marroquí, de los últimos años en su federación de ajedrez hasta enero de 2024 que no se formó una gestora provisional, encabezada por una mujer, Bouchra Kadiri, primera campeona femenina de ajedrez en Marruecos en 1983 e hija del destacado ajedrecista y dirigente federativo Mokhtar Al Kadiri (1928-1989).
Esas irregularidades fueron permitidas y consentidas desde FIDE, cuyo presidente se fotografió ufano con el ya expresidente de la federación marroquí, Mustafa Amazzal, acusado de graves irregularidades, la última llevada a cabo precisamente en el denominado Open Internacional Mohamed VI celebrado el año pasado.
Si bien FIDE tuteló un tiempo la federación marroquí, por cierto, contando con el ex presidente de la federación francesa de ajedrez, FFE (2016-20), Bachar Kouatly, acusado en la propia Asamblea Nacional francesa de nepotismo, y que es un asiduo de Casablanca, lo cierto es que luego, y tras una serie de recomendaciones, dejó de nuevo el cargo en Amazzal.
Los opositores al presidente marroquí sostenían entonces que no se puede hacer más daño al ajedrez marroquí ″porque ya está completamente muerto”. Pero, al parecer, FIDE y su presidente, a pesar de las denuncias recibidas, no se había enterado y lo dejó actuar durante bastante tiempo. Finalmente, tras años y años de denuncias, tuvo que intervenir el propio Ministerio de Educación y Deportes marroquí que impuso una gestora.
Pero habría que recordar quién es Chakib Benmoussa, el verdugo del Sábado Negro. En 2008, el sábado 7 de junio, hubo una dura represión policial para acabar con el bloqueo del puerto pesquero de la localidad de Sidi Ifni (muy vinculada con España), por grupos de jóvenes desempleados que exigían a las autoridades que acabaran con la marginación que sufrían. Se les sumaron decenas de personas en una manifestación que recorrió las calles de la ciudad.
Las protestas fueron reprimidas brutalmente por la policía marroquí. Ifni fue tomada por tres mil policías siendo entonces ministro de Interior (2006-10), Chakib Benmoussa, y conocido desde aquel día como ‘El verdugo del Sábado Negro’.
Una delegación de abogados que visitó la ciudad dos días después de la brutal represión afirmó que, además de robos y saqueos, los antidisturbios torturaron a vecinos. Como hecho llamativo, “¡Hijos de España! y ¡españoles!”, eran los gritos de los policías que reprimían a los vecinos de Sidi Ifni.
Los hechos motivaron que el Gobierno aceptara entonces, por tercera vez en la historia de Marruecos, la creación de una comisión de investigación parlamentaria.
Posteriormente Benmoussa fue nombrado embajador en Francia (donde se le planteó una demanda de jóvenes de Ifni) de 2012 hasta 2021 en que pasó a ser nombrado ministro de Educación, donde también está desarrollando una polémica gestión.
De hecho, este curso escolar se ha enfrentado a una catarata de huelgas estudiantiles universitarias sobre todo por parte de estudiantes de Medicina que han durado más de tres meses.
Sin embargo, para FIDE reúne todos los méritos para ser premiado por su ″contribución al ajedrez”, ignorándose qué méritos y gestos ajedrecísticos cuenta en toda su carrera política y diplomática. Lo cierto es que ninguno y jamás se le ha visto ante un tablero.
En todo caso es normal que un tirano premie a un verdugo y que las medallas y condecoraciones en la actual y pasada FIDE, estén totalmente desacreditadas. Recordemos que el anterior presidente, también ruso, Kirsán Ilyumzhinov, ‘el megalómano de Kalmukia’ jugó y alabó al dictador libio Muamar el Gadafi (1942-2011) y al sirio Bashar al Asad.
El próximo a condecorar, sin duda y siguiendo las órdenes de su jefe Vladimir Putin, será su aliado, el primer ministro húngaro Viktor Orbán ahora que Budapest acogerá en septiembre las Olimpiadas de Ajedrez.
Y es que Dvorkovich, curiosamente, y su elección, fue lo que unió a dos dirigentes actualmente unidos también por la orden de detención del Tribunal Penal Internacional de Justicia de La Haya: el ruso Putin y el israelí Benjamín Netanyahu, ambos por presuntos delitos de crímenes de guerra y lesa humanidad y que coincidieron en querer ponerlo al frente de la FIDE en 2018.
Uno viendo todo esto recuerda una vieja canción del cantautor argentino exiliado en España, Rafael Amor (1948-2019), ‘Elegía a un tirano’ donde se pregunta «¿Adónde irás tirano, adónde irás?»