El cambio climático podría causar hasta 250.000 muertes anuales a nivel mundial dentro de 15 años según los datos aportados por la Organización Mundial de la Salud Región Europea.
El desafío que supone para muchos países del mundo que tendrán que intensificar sus esfuerzos para alcanzar la agenda 2030 para el desarrollo sostenible es importante. El aumento del nivel del mar; los fenómenos meteorológicos extremos; las olas de calor; las fuertes precipitaciones, inundaciones o sequías así como el aumento de la escasez del agua entre otros elementos, están amenazando al planeta si no cambia la política tanto de los países pequeños como en los grandes.
Abordar los impactos negativos de este cambio climático que ya está teniendo lugar es una prioridad global pero faltan inversiones y se necesitan medidas adecuadas para alcanzar los objetivos del desarrollo sostenible (ODS) de las Naciones Unidas. Tomar medidas concretas para proteger la salud de los riesgos ambientales y hacer que todos en su nivel, compartan la responsabilidad de salvaguardar el medioambiente es necesario para proteger la salud de millones de personas.
La Organización Mundial de la Salud Europa lanzó una iniciativa para países pequeños en 2013 que reunió a los estados miembros de la región europea que tenía una población menor de un millón de habitantes. Los ocho miembros de la Red de información de salud de pequeños países (SCHIN) que completan esta iniciativa son: Andorra, Chipre, Islandia, Luxemburgo, Malta, Mónaco, Montenegro y San Marino.
Hay que señalar que a todos los efectos el cambio climático supondrán cerca de cuatro millones de dólares en gastos derivados de daños directos a la salud producidos por enfermedades asociadas al mismo. Informar, concienciar y generar sistemas de información acerca de salud y las consecuencias de este hecho hará que pueda tener lugar el desarrollo sostenible previsto para la agenda 203o.