La Fundéu indica que copyright, voz inglesa que significa ‘derecho de explotación y reproducción de una obra intelectual, artística o científica’, puede sustituirse en español por derechos de autor o de edición.
Sin embargo, en los medios de comunicación este anglicismo es frecuente en frases como «La guerra del copyright vuelve a la Eurocámara sin consenso a la vista», «La nueva ley de copyright de la UE impedirá sacar fotos y vídeos en estadios de fútbol» o «Europa no es el único lugar donde el copyright se aplica a los monumentos».
El término copyright figura recogido en letra cursiva, como una voz extranjera, en el Diccionario académico, que lo define como ‘derecho de autor’, siendo este el ‘que la ley reconoce al autor de una obra intelectual o artística para autorizar su reproducción y participar en los beneficios que esta genere’.
Así pues, la alternativa derechos de autor (y, en su caso, derechos de edición) es una traducción válida y preferible al anglicismo en los textos en español.
En los ejemplos anteriores, por tanto, habría sido preferible optar por ella: «La guerra de los derechos de autor vuelve a la Eurocámara sin consenso a la vista», «La nueva ley de derechos de autor de la UE impedirá sacar fotos y vídeos en estadios de fútbol» y «Europa no es el único lugar donde el derecho de autor se aplica a los monumentos».
Se recuerda, además, que su símbolo es © y que, si se opta por emplear la palabra inglesa, lo adecuado es escribirla con letra cursiva o, si no se dispone de este tipo de letra, entrecomillada.