El día 19 de junio, tras las reuniones mantenidas con la UNESCO y otras instituciones, el secretario de estado de Cultura, Jordi Martí Grau, comunicó que la Conferencia Mundial de Políticas Culturales y Desarrollo Sostenible, Mondiacult 2025, se ponía en marcha.
La Conferencia, que se celebrará en Barcelona, en otoño, se centrará en tres temas clave en nuestros días:
- Cultura de la paz.
- Inteligencia artificial; y
- Derechos culturales
Además del interés de los temas, Mondiacult 2025 se desarrollará con posibles cambios a la vista en la UNESCO y, para España, será muy importante porque además de informar a las políticas culturales españolas, entre 2024 y 2026 nuestro país participará también en otros acontecimientos importantes para la cooperación para el desarrollo, la cooperación cultural y las relaciones euro-latinoamericanas.
Efectivamente, nos referimos a:
- La Cumbre del Futuro. Nuestra Agenda Común, que se celebra en Naciones Unidas los días 23 y 24 de septiembre de 2024 y que reúne a los líderes mundiales para forjar un nuevo consenso internacional a fin de mejorar el presente y salvaguardar el futuro. Se trata de una oportunidad para demostrar que la cooperación internacional puede responder eficazmente a los retos que se plantean. La Cumbre emitirá un documento final denominado «Un Pacto para el Futuro» que ya se está negociando y que dedica capítulos a los temas siguientes: i) el desarrollo sostenible y la financiación para el desarrollo; ii) la paz y la seguridad internacionales; iii) la ciencia, la tecnología y la innovación y la cooperación digital; iv) la juventud y las generaciones futuras; v) la transformación de la gobernanza global; o vi) la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
- La veintinueve Cumbre Iberoamericana que se celebra en Cuenca (Ecuador) los días 14 y 15 de noviembre de este año y que tiene como tema central “«Innovación, Inclusión y Sostenibilidad». Ante los problemas internos y externos del gobierno de Daniel Noboa, siendo uno de los más graves el asalto a la Embajada de México en Quito, es probable que los resultados de la Cumbre no sean satisfactorios. A este respecto, se habla ya de la necesidad de que España asuma la organización de la treinta Cumbre Iberoamericana en 2026 para intentar relanzar el sistema, como ya se hizo con la quince Cumbre en Salamanca en 2005, para beneficio de la ciudadanía iberoamericana.
- Noveno Congreso Iberoamericano de Culturas, que se celebrará en Santiago de Chile el 15 de abril de 2025, organizado por el Ministerio chileno de las Culturas, las Artes y el Patrimonio y los organismos iberoamericanos, y que ha sido anunciado a finales de noviembre pasado por la ministra Carolina Arredondo Marzán.
El Congreso abordará los desafíos y posibilidades del desarrollo cultural y la inteligencia artificial. Enrique Vargas, diplomático mexicano y Coordinador del Espacio Cultural Iberoamericano (ECI) de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), ha manifestado: «Es una oportunidad muy significativa, primero porque el Congreso se hará en Sudamérica, y segundo, porque tendrá énfasis en las juventudes. Esto nos interesa muchísimo, ya que el setenta por ciento de los beneficiarios de los trece programas de cooperación del ECI son personas jóvenes. En esta instancia podremos profundizar en el diálogo y generar consensos e insumos muy importantes para lo que será la próxima versión de Mondiacult, que será el 2025. Empezamos a trabajar con los equipos del Ministerio de las Culturas de Chile en los próximos meses para ponerlo en marcha». - Cuarta Cumbre Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC)-Unión Europea (UE), que tendrá lugar en el mes de julio de 2025 en Colombia; un escenario de gran importancia de concertación entre las dos regiones que permitirá estructurar e implementar una agenda común de intereses y de acciones en materia de cooperación e inversión. No perdamos de vista que la Cancillería colombiana adquiere un gran protagonismo internacional con la presidencia de la CELAC, la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), el Consenso de Brasilia, la Comunidad Andina y la Alianza del Pacífico.
- Cuarta Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo, que se celebrará en España en julio de 2025 y que supondrá el impulso a la movilización de las políticas y los recursos para el desarrollo por parte de la comunidad internacional para la consecución de la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) a nivel global. Se tratarán cuestiones esenciales como las políticas fiscales, la cooperación internacional para combatir los flujos ilícitos y la evasión fiscal, la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD), la financiación privada, el comercio, la sostenibilidad de la deuda, la ciencia y la tecnología y la reforma de la gobernanza del sistema financiero internacional. La Conferencia será fundamental para alinear las agendas de desarrollo de Naciones Unidas, instituciones financieras internacionales y bancos de desarrollo, y el resto de los actores relevantes en la materia.
- Conferencia Mundial de Políticas Culturales y Desarrollo Sostenible, Mondiacult 2025, que se celebrará en Barcelona en otoño, con la que hemos comenzado este artículo. Ahora la UNESCO tiene que aportar su agenda temática y de reuniones de la Conferencia, en la que participarán instituciones españolas e iberoamericanas.
- Posibilidad de que España organice la treinta Cumbre Iberoamericana en 2026.
Revisadas las reuniones multilaterales, y a la espera de que se confirme la organización de la treinta Cumbre Iberoamericana en 2026, España debe trabajar también en sus relaciones bilaterales.
Por ejemplo, sabemos de la importancia de asistir a las tomas de posesión de los presidentes latinoamericanos.
De todas ellas, hay una muy importante, el 1 de octubre de 2024, la de la presidenta de México Claudia Sheinbaum, para la que convendría construir un relato distinto al que hemos mantenido en los últimos años. Y máxime, cuando hace pocos días se han hecho públicos los nombramientos de algunos de los ministros de Sheinbaum, entre los que se encuentran Marcelo Ebrard, como secretario de Economía y quien durante su etapa como canciller negoció con José Manuel Albares, precisamente, apoyos para la celebración del Mondiacult 2022; y Juan Ramón de la Fuente, como secretario de Relaciones Exteriores, quien conoce muy bien España, dado su paso por la Universidad de Alcalá de Henares, y quien en los últimos años ha fungido como embajador de México en la ONU.
En definitiva, en conjunto, estamos ante una gran oportunidad para dar un fuerte impulso a las relaciones de España con América Latina y Caribe, lo que está por encima de los intereses ideológicos y partidistas. Ojalá, que el Gobierno español aproveche esta oportunidad.
Tomás Mallo Gutiérrez
27/06/2024