Para el machismo o neomachismo todas las violencias son iguales, pero no lo son. Existen tipos diferentes de violencia, según para qué se utilice y por qué.
Así por ejemplo podremos ver:
- Una violencia para imponerse, dominar, controlar…, anulando a la persona.
- Una violencia generalizada, personas que suelen ser agresivas con todo el mundo (normalmente asociados a trastornos de personalidad)
- Otra circunstancial (que se da porque hay un conflicto o conflictos no resueltos) de ataque y defensa y viceversa.
Es importante distinguirlas y por tanto evaluarlas adecuadamente, para poder hacer una intervención precisa. Lo cual exige conocimiento, atención, trabajo, cuidado… y a pesar de todo es posible equivocarse ¡somos humanos y humanas!
Sin embargo las meteduras de pata están aseguradas cuando no se tienen conocimientos y encima se cree que sí, entonces se transita entre la inconsciencia y el ir sobrados o sobradas, o también entre el narcisismo agresivo y la sencilla calma que aporta el conocimiento cierto. Las consecuencias dependiendo de qué profesión se ejerza, pueden ser nefastas para las víctimas.
En cuanto a la violencia ejercida por un maltratador consistirá en agredir a la pareja para dominarla y controlarla anulando su autoestima, y puede que su problema consista en ser un maltratador y no tener más problemas como la bebida, o como un trastorno de personalidad, si se diese este caso entonces tendría los tres: el maltrato, la bebida y el trastorno de personalidad. Lo que a la hora de la intervención se tiene que tener en cuenta.
Como existen unos roles y estereotipos de género aprendidos en la cultura machista, sucede que:
- Las mujeres no van en manadas con la intención de violar a un hombre para divertirse traumatizándolo.
- Las mujeres no apuñalan a sus ex parejas un día sí y otro también… como se ve habitualmente a través de los medios de comunicación, que sí lo hacen los hombres, y muchos de ellos reincidentes y “expertos” en ese maltrato, con otras ex parejas.
- Los hombres “normalmente” no trabajan de prostitutos, por considerarlo un trabajo como otro cualquiera, en tal caso ejercen de puteros habitualmente.
- Muchos jueces lejos de comprender a las mujeres violadas, comprenden a los hombres, y que un desliz lo tiene cualquiera, además con la visión machista entienden que las mujeres pueden disfrutar… y que como iban provocando…
También hay mujeres violentas y agresivas, asesinas… pero esa agresividad suele ser generalizada, pues en estos casos lo más habitual es que padezcan un trastorno de personalidad, otras psicopatías, un brote psicótico… y como con todo comportamiento, hay que analizarlo en toda su amplitud, para distinguirlo de manera concreta e intervenir convenientemente.
Asimismo podemos encontrarnos con hombres y mujeres con la suficiente inteligencia afectiva, como para ejercer respeto por las personas independientemente de su sexo, orientación sexual, religión… para lo cual es imprescindible relacionarse desde la reciprocidad y no desde el poder-“autoridad”; siendo la consideración de la otra persona como un igual que tiene los mismos derechos humanos, una condición indispensable en las relaciones de empatía. Ya que en una relación basada en la “autoridad”-sumisión no hay respeto, hay imposición y una exigencia de obediencia.
Mientras en la sociedad competitiva la agresividad está bien considerada y además es premiada, y la distracción y la impulsividad a la orden del día… una consecuencia lógica puede ser que fiarse, lo que se dice fiarse podemos dejarlo para anteayer…
Mucus, recuerda que: La superioridad intelectual del machismo consiste en: mandar un huevo, apoyarse en otro y hacer todo por cojones.
La inteligencia mocarra esputa:
Antes de opinar, aprender
antes de mirar respetar
antes de hablar, pensar
y antes de hacer, querer.