El verdadero problema de la muy comprensible desazón femenina actual y mayoritaria es que no basta con que el poder (masculino) haya reparado definitivamente en ella y esté presto a ponerle fin.
El verdadero problema es que no basta con ese ‘hala, ya pasó’. Porque además de no haber pasado del todo, de estar ocurriendo aún, la desigualdad entre los hombres y las mujeres necesita algo que no existe (del todo): comprensión. Para comprender hace falta algo más que memoria y deseo. Una vez comprendido bien por todos (y todas, o por todes o por todxs o por tod@s), cosa harto difícil, nos quedará utilizar lo comprendido para acabar con semejante problema.
En este sentido, y para paliar esta dificultad desde el ámbito formativo que le es propio, Santillana Educación viene publicando desde 2015 los libros de la colección El papel de las mujeres, cuyo objeto es facilitar didácticamente el conocimiento, la comprensión, de la igualdad de género en las aulas.
Como pegunta, como se pregunta, la escritora Belén Gopegui en el prólogo a El papel de las mujeres en la literatura:
“¿Qué poder necesitan las mujeres para que se reconozca su sabiduría su autoridad?”
O como señala Francisca Puertas Maroto: El papel de las mujeres en la ciencia y la tecnología. Santillana Educación, 2015.
“No se entiende una investigación de calidad si no hay especialistas multidisciplinares, e igualmente si no hay una integración efectiva de géneros. La investigación ha demostrado que el sesgo de género tiene implicaciones importantes para el contenido de la ciencia. La desigualdad de género conlleva una pérdida de oportunidades y errores cognitivos en el conocimiento, la tecnología y la innovación”.
O Helena Rausell Guillot: El papel de las mujeres en la sociedad actual. Santillana Educación, 2016
“Hoy por hoy, no existe un solo país en el mundo en el que las mujeres hayan alcanzado la igualdad en lo tocante a la salud, la educación, el empleo, la información, la transmisión del patrimonio, la representación política, la libertad de expresión o la toma e decisiones en el seno de la pareja y la familia. […] La falta de igualdad de género ha sido denunciada como una de las principales formas de discriminación existentes en el mundo”..
Escribe Pilar Pardo Rubio:
“Crear cultura es una acción que precisa excedente, excedente de tiempo, de espacio y de dinero. Los tres recursos que han determinado y determinan las relaciones de desigualdad entre hombres y mujeres. No es casualidad que fuera la literatura una de las primeras actividades artísticas, pero también productivas de las mujeres.
Pilar Lozano Mijares: El papel de las mujeres en la literatura. Santillana Educación, 2017.
[…] No se puede hablar de diversidad cultural sin tener en cuenta la igualdad en el acceso de mujeres y hombres a la producción y creación artística y cultural, así como en el acceso a los bienes y servicios culturales”.
Pilar Aguilar Carrasco: El papel de las mujeres en el cine. Santillana Educación, 2017.
“¿Por qué hay tan pocas películas dirigidas por mujeres? El número de películas y de series escritas o dirigidas por mujeres rara vez sobrepasa el 15%. […] ¿Hacen las mujeres cine de mujeres?”
Pilar Rubio Remiro: El papel de las mujeres en el descubrimiento del mundo. Santillana Educación, 2018.
“La mujer como sujeto viajero ha sido, y lo sigue siendo, un elemento desafiante de ese afuera controlado por lo masculino. Un espacio ajeno que sido el ámbito de lo heroico, pues exige a quien se adentre en él algunos atributos del héroe clásico, asignados tradicionalmente a la masculinidad […] Redefinir estos valores como inherentes a las personas, sin distinción de género, es la tarea a la que se han entregado muchas mujeres valientes […]. La globalización, la facilidad de los transportes y al lenta, lentísima, asunción de las mujeres como sujetos de derecho desdibuja las fronteras físicas y normativas, aunque siguen siendo significativas la cantidad de trabas subliminales que tratan de mantenerlas inmóviles”.
Enlaces:
- Colección El papel de las mujeres de Santillana Editorial