Walter Benjamin: No dejo de pensar en esa isla

Un libro de Vicente Valero recoge las dos estancias de Walter Benjamin en Ibiza

El final trágico de Walter Benjamin es conocido: huyendo del nazismo a pie a través de los Pirineos fue detenido por la policía franquista en el puesto fronterizo español de Port Bou en septiembre de 1940. Ante la imposibilidad de huir y para no tener que regresar a Francia, Benjamin decidió suicidarse la misma noche del día que lo detuvieron.

Periferica-Experiencia-y-pobreza-Walter-Benjamin Walter Benjamin: No dejo de pensar en esa islaSu intención era trasladarse a los Estados Unidos desde España, un país que le traía los buenos recuerdos de dos estancias en la isla de Ibiza en los años 1932 y 1933. El escritor Vicente Valero rescata la memoria de aquellos días en su libro “Experiencia y pobreza. Walter Benjamin en Ibiza” (Periférica) a través de testimonios de personas que tuvieron relación con el escritor alemán, de su correspondencia con amigos y conocidos y de los textos de sus obras en los que escribió sus experiencias en la isla y con las personas con las que trató allí.

La isla del paraiso

Walter Benjamin quedó fascinado con el paisaje y con las gentes de Ibiza cuando llegó por primera vez el 19 de abril de 1932 desde Barcelona en el “Ciudad de Valencia”, un viaje que recreó más tarde en su obra “Catania”. Tenía 39 años y aquella naturaleza virgen, aquellas costumbres ancestrales mantenidas desde tiempo inmemorial por campesinos que practicaban una agricultura arcaica de subsistencia, y el descubrimiento de las casas tradicionales, en las antípodas de la moderna arquitectura de hierro y cristal que se estaba imponiendo en toda Europa y que Benjamin odiaba, colmaban en buena medida el modelo de vida que perseguía y su condición intelectual. Se instaló en una de aquellas casas en las afueras de San Antonio, el pueblo en el que recopiló historias que le contaban los campesinos y los marineros de la isla, las que publicó en “El narrador” y en “Imágenes que piensan”.

Había escogido Ibiza para pasar unas cortas vacaciones, que se prolongaron más de tres meses, animado por su amigo Felix Noeggerath, quien hacía algún tiempo que vivía en la isla con su esposa y con uno de sus hijos, un joven estudiante que trabajaba en una tesis doctoral sobre las costumbres de la isla y que moriría allí de unas fiebres tifoideas. Por fin había encontrado un lugar donde trabajar a gusto, olvidar sus problemas personales, gozar de un clima que le permitía tomar baños de sol y de mar casi todo el año y dar largos paseos en contacto con la naturaleza, experiencias que trasladó a obras como “Al sol”, “Una tarde de viaje” o “La cerca de cactus”, ficciones en las que recreó figuras de personajes que conoció y trató, como el empresario José Roselló Cardona o Jokisch, el exmarino cazador de lagartijas y simpatizante de Adolf Hitler a quien el fotógrafo dadaísta y escritor Raoul Hausmann, residente en la isla, también convirtió en uno de los personajes de su novela “Hyle”.

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Walter Benjamin por Xulio Formoso
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Segundo viaje. un clima social enrarecido

En abril de 1933, después de comprobar que Berlín se había transformado en una ciudad peligrosa para los judíos y los intelectuales izquierdistas tras la llegada de Hitler al poder, Walter Benjamin buscó de nuevo en Ibiza un lugar en el que continuar su trabajo sin sobresaltos ni amenazas, aunque no podía desprenderse de sus preocupaciones: su hijo detenido por los nazis, su hermano asesinado, su exmujer huída a Italia, su pasaporte a punto de caducar… Esta vez Benjamin encontró en Ibiza un ambiente enrarecido. Al contrario que en su estancia anterior, no pudo encontrar un alojamiento digno, en parte porque su situación económica se había deteriorado al cancelarse en Berlín algunos de los medios en los que colaboraba y tener que escribir trabajos mal pagados firmados con seudónimos. Se alimenta mal, rompe con algunos de sus amigos de la isla, entre ellos los Noeggerat y el matrimonio Jean y Guyet Selz, con quien compartía experiencias con opio y hachís y cuya ruptura frustró la traducción al francés de la obra de Benjamin “Infancia en Berlín hacia 1900”.

Dos amistades de esta etapa van a marcar profundamente a Benjamin. Una de ellas fue la que mantuvo con Paul René Gauguin, nieto del pintor, con quien compartía largos paseos y excursiones por mar y tierra. Gauguin inspiró algunos de sus relatos: “Conversaciones sobre el corso” y “Tener buena mano”. La otra fue con Maximilian Vershpool, a quien convirtió en su secretario (mecanografiaba sus escritos no sólo sin remuneración sino que incluso ayudaba económicamente a Benjamin), y que resultó ser un simpatizante nazi que más tarde fue Jefe de Sección de las SS en Hamburgo.

Una de las pocas experiencias gratificantes que vivió durante esta segunda estancia en Ibiza fue su relación con Anna María Blanpot ten Cate, una pintora holandesa de 30 años que llegó a la isla huyendo aterrorizada de un Berlín en el que se perseguía a los judíos y se quemaban montañas de libros. El amor que surgió entre ellos le compensaba de los momentos amargos que sufría en esta etapa y le daba la oportunidad de vivir un último romance. A Anna María dedicó Benjamin dos poemas y un texto enigmático, “Agesilaus Santander”. Posiblemente pesara en la decisión de Benjamin de abandonar la isla el 26 de septiembre de 1933 su ansiado reencuentro con Anna María en París, a donde se había trasladado la joven. Pero las cosas se iban a torcer cuando Blanpot ten Cate abandonó París para casarse con su amante Louis Seller y Walter Benjamin fue confinado en un campo de concentración francés del que salió gracias a la intervención de algunos amigos, que le animaron a viajar a Estados Unidos, donde antiguos compañeros le reservaban un trabajo a la altura de sus capacidades intelectuales.

Cuando lo detuvieron parece ser que estaba decidido a emprender ese viaje. O tal vez a volver a Ibiza porque, según confesaba en una carta a su amigo Alfred Cohn, “No dejo de pensar en esa isla”.

Francisco R. Pastoriza
Profesor de la Universidad Complutense de Madrid. Periodista cultural Asignaturas: Información Cultural, Comunicación e Información Audiovisual y Fotografía informativa. Autor de "Qué es la fotografía" (Lunwerg), Periodismo Cultural (Síntesis. Madrid 2006), Cultura y TV. Una relación de conflicto (Gedisa. Barcelona, 2003) La mirada en el cristal. La información en TV (Fragua. Madrid, 2003) Perversiones televisivas (IORTV. Madrid, 1997). Investigación “La presencia de la cultura en los telediarios de la televisión pública de ámbito nacional durante el año 2006” (revista Sistema, enero 2008).

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