Con muy buen nivel prosigue la competición oficial del festival de Cannes, en la que hemos visto otras dos películas: « El pasado » del director iraní Asghar Farhadi, y « Joven y bonita » del director francés Francois Ozón. Ambas acogidas con aplausos y mucho respeto en las proyecciones de prensa.
Asghar Farhadi director iraní ganador del Oso de Oro en el festival de Berlín con « La separación », obtuvo el César a la mejor película extranjera, recaudando en Francia más de un millón de entradas. Todo un récord para una película de autor, que fue producida con el modesto presupuesto de un millón de euros. El gran éxito de « La separación » ha conducido a su distribuidor y productor francés, Memento films, a proponerle esta nueva película « El pasado », enteramente rodada en Francia, con Berenice Bejo, Ali Mossafa, Tahar Rahim y Pauline Burlet como principales intérpretes.
Asghar Farhadi ha dispuesto en esta ocasión de un presupuesto de ocho millones de euros para realizar « Le passé » (el pasado) escrita y dirigida por él mismo. Se trata en cierto modo de una posible continuación de aquella separación en Teherán que filmó en su película anterior. Cuatro años después de su separación de María, Ahmad viaja de Irán a Francia, para oficializar su divorcio. Entre tanto María que vive con sus dos hijas en una modesta casita en Sevran, periferia parisina, comparte su vida con otro hombre a su vez casado y con un hijo, cuya esposa se encuentra hospitalizada tras una tentativa de suicidio.
Tensiones y conflictos en esa familia fracturada y recompuesta van a estallar con la llegada a París de Ahmad. Un excelente guión en torno al tema de la pareja, de la culpabilidad, el perdón y la verdad, en el que vamos descubriendo los diversos elementos de este drama familiar y humano. Farhadi desmenuza los sentimientos de sus personajes y aborda con inteligente construcción esa búsqueda de la verdad. Lejos de todo maniqueismo o visión simplista, los puntos de vista y las verdades de cada cual se cruzan y se barajan con un preciso sentido del suspense.
Su brillante puesta en escena está siempre al servicio del relato y su mirada de cineasta nos sorprende en cada uno de sus planos. El único bemol a este magnífico film es quizás su excesivo metraje, dos horas y diez minutos, que hubiera ganado con algunos recortes a la hora del montaje.
En estos tiempos globalizados en que tanto se discute de cuál es la nacionalidad de una película, y tan lejos ya de aquellos festivales de Cannes en que las películas se presentaban con banderita y pabellón nacional, cabe subrayar que la de Asghar Farhadi es una película franco iraní, rodada en Francia, en francés y con algunos diálogos en iraní, en la que encontramos la cultura de su autor. Farhadi ha logrado una película muy personal y propia, y todo ello sin perder su alma y su idiosincrasia.
Estupendo casting el de sus cuatro actores principales: La franco argentina Berenice Bejo – a la que recordarán por su papel en « The Artist »,- aquí en el papel de María, una mujer libre y moderna que trabaja en una farmacia y quiere reconstruir su vida sentimental y familiar. El veterano actor iraní Ali Mossafa es el exmarido que regresa a Francia. El actor franco argelino Tahar Rahim – gran revelación en «Un profeta » 2009, de Jacques Audiard- , es el nuevo compañero sentimental de María, que trabaja en una tintorería con su esposa. La joven actriz belga Pauline Burlet es la hija adolescente en plena crisis y foco de tensiones en esa célula familiar.
Otra buena sorpresa de la competición oficial ha sido « Joven y bonita » película del director francés Francois Ozón. Un excelente guión bordado en torno a cuatro canciones de Françoise Hardy y durante cuatro estaciones, primavera, verano, otoño e invierno, un año escolar en la vida de una jovencita de 17 años. El paso de la adolescencia a la edad adulta, y la inciciación a la sexualidad de esa joven de buena familia, estudiante en el liceo Henry IV de París, es abordado por François Ozon desde un ángulo original y transgresor.
Es la tercera vez en su filmografía que Ozón utiliza canciones de Francois Hardy, como expresión del amor adolescente y romántico. En cada estación asistimos al relato desde el punto de vista de uno de sus personajes. El verano con el hermano pequeño, el otoño con uno de los clientes, el invierno con la madre y la primavera con el padrastro, pero todo ello entorno al personaje dual de Isabelle-Lea.
La película empieza con una escena en la que el hermano pequeño observa con prismáticos a su hermana, mientras ella se broncea en la playa con los pechos desnudos. La fascinación del Ozón cineasta por el «voyeur» se resume aquí en una secuencia que sirve para introducir al espectador en esta historia que nos reserva varias sorpresas. El misterio rodea las verdaderas motivaciones de Isabelle para transformarse en Lea, el nombre de prostituta que utiliza en internet..
Esa joven en contacto con Internet y sus múltiples ofertas, en plena crisis de adolescencia, con un padre ausente y una primera relación sexual poco satisfactoria, se ve tentada y atraida por la prostitución eventual. Ozón construye así un convincente personaje de adolescente belle de jour, misteriosa y sensual, con una doble vida que esconde cuidadosamente a su familia, hasta que un día estalla el drama.
Tras el éxito de « Dans la maison » protagonizada por el joven Ernst Umhauer, François Ozón vuelve a explorar el universo de la adolescencia, con una ficción que se apoya en una solida documentación sobre el tema de la prostitución en círculos estudiantiles y con una secuencia casi documental en el liceo Henry IV de Paris, en donde los estudiantes recitan versos de Rimbaud.
Esa chica joven y bonita, es interpretada con talento por Marine Vacth. Se trata del primer papel protagónico importante en la carrera de esa joven y prometedora actriz, verdadera revelación del film, que comparte protagonismo con Geraldine Pailhas, Frederic Pierrot y la participación en las últimas escenas de la veterana Charlotte Rampling.
Con practicamente una película por año, desde sus comienzos en 1997 con « Gotas de agua sobre piedras ardientes », Francois Ozón se ha afirmado como uno de los cineastas autores franceses mas prolíficos e interesantes de su generación. Entre sus películas mas conocidas : « Ocho mujeres », « Bajo la arena », o « Dans la maison ». « Joven y bonita » es ahora su décimosexta película de ficción.
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